Introducción
Tener ansiedad ya es difícil. Pero cuando a eso le sumas la culpa, se vuelve una carga doble: te sientes mal por dentro, y encima te reprochas por sentirte así.
Te dices cosas como:
“¿Por qué me siento así si tengo todo para estar bien?”
“Otros tienen problemas más graves que yo.”
“Debería poder con esto.”
Y sin darte cuenta, esa exigencia te hunde más.
Pero ¿sabes algo? Sentir ansiedad no te hace débil. Te hace humana.
¿Por qué sentimos culpa por estar mal?
En una sociedad que glorifica la productividad, la perfección y el control, admitir que estás mal puede sentirse como un fracaso. Desde pequeñas aprendimos que hay que ser fuertes, “aguantar” y no molestar.
Así que cuando la ansiedad aparece, la mente lo interpreta como un error, una falla personal. Pero la ansiedad no es debilidad: es una respuesta natural del cuerpo y la mente cuando sienten que algo no está bien.
Frases internas que alimentan la culpa (y cómo reescribirlas)
❌ “Hay gente que está peor que yo”
✔️ Reescribe: “El dolor no se compara. Tengo derecho a sentir lo que siento.”
❌ “No tengo motivos para estar así”
✔️ Reescribe: “Mi cuerpo y mi mente están pidiendo atención. Eso ya es motivo suficiente.”
❌ “Estoy fallando como persona”
✔️ Reescribe: “Estoy haciendo lo mejor que puedo con lo que tengo. Eso es suficiente por ahora.”
Cómo se ve la culpa silenciosa en la ansiedad
- Evitas hablar de cómo te sientes por miedo a ser una “carga”.
- Te exiges estar bien para no incomodar a los demás.
- Minimizar lo que te pasa con frases como “no es para tanto”.
- Te comparas con otras personas que “lo manejan mejor”.
Esta culpa no se nota a simple vista, pero agota, drena y te aleja del autocuidado.
Pasos para soltar la culpa y empezar a acompañarte
Reconoce que tu ansiedad es válida, aunque no tenga una causa “lógica”
No necesitas justificar lo que sientes. Lo sientes, y punto.
Háblate como le hablarías a una amiga
¿Le dirías a tu mejor amiga que es débil por sentirse mal? Entonces, ¿por qué te hablas así a ti?
Haz journaling de compasión
Escribe lo que sientes y luego responde desde un lugar amoroso. Por ejemplo:
“Hoy me sentí inútil por no poder salir de la cama… pero también estoy agotada, y eso no me hace menos valiosa.”
Ponle un alto al juicio interno
Cada vez que notes que te estás criticando por tener ansiedad, haz una pausa y di mentalmente:
“Estoy sintiendo, no fallando.”
Cierre: No estás rota, estás cargando más de lo que parece
No tienes que demostrar nada. No tienes que estar bien todo el tiempo.
Sentir ansiedad no te hace menos. Lo valiente no es evitarla, lo valiente es seguir adelante mientras la sientes.
Y si hay días en los que no puedes… eso también está bien. No se trata de ser perfecta, se trata de ser compasiva contigo.
Soltar la culpa es el primer paso para sanar.
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